NAVEGAR

Soy Theda, una fotógrafa que vive y navega en un barco de vela. Estos son algunos de los recorridos y lugares que hemos visitado con nuestro barco Olé, un catamarán de 38 pies, además de pensamientos y anécdotas durante ésta travesía de vida por los mares. Salimos de Francia en Junio de 2011, y desde entonces hemos recorrido parte del Atlántico, Mediterráneo y ahora en 2013 estamos navegando en el Caribe.

domingo, 20 de octubre de 2013

cruzar el estrecho de Gibraltar

Navegamos toda la noche para poder cruzar el estrecho de Gibraltar de día. Amaneció pasando Cadiz, seguimos unas millas más y teníamos a Tarifa por babor y Marruecos por estribor. El estrecho une los dos continentes Africa y Europa. Había mucho tráfico marino de barcos petroleros, ferries, cargueros. Fuimos más pegados a la costa para evitar un poco el tráfico. Lo pasamos tranquilamente porque había poco viento, así que tuvimos que ir a motor un tramo. Llegamos a Gibraltar a las dos de la tarde, del  09 de Julio de 2011, entramos a la marina Queensway Quay


Gibraltar es un territorio de ultramar que pertenece al Reino Unido, está en la punta sur de la península Ibérica, y es la entrada al Mediterráneo. Tiene 6 Km de largo y 1.5 de ancho donde viven unas treinta mil personas; entre ingleses, españoles, judíos sefaradis, marroquis  e indues. Hay un peñón en medio que desciende hasta la punta de Europa, el punto más meridional del territorio, que comunica el mar mediterráneo con el Atlántico. Se habla inglés pero la mayoría sabe español por su proximidad con España. Perteneció a España pero a finales del siglo XV fue ocupada por una escuadra anglo holandesa durante la guerra de sucesión Española, cuando termino, España la cedió a la corona Inglesa. Sigue siendo un territorio muy controvertido, y los españoles la siguen reclamando. Es muy gracioso porque escuchas hablar a la gente un perfecto inglés británico y de pronto cambian a un español andaluz. La ciudad tiene detalles muy ingleses como las cabinas telefónicas o los autobuses rojos de dos pisos. Estuvimos una semana registrando el barco y haciendo un poco de turismo, aunque es tan pequeño que lo recorres en un día. Tiene una calle peatonal comercial Main street, con muchas tiendas libre de impuestos, mucha gente cruza la frontera para comprar  productos electrónicos, cámaras fotográficas, joyas, licores, cigarros y perfumes. Se puede subir al peñón en funicular, arriba viven unos monos, pero hay que tener cuidado de no acercarse mucho porque se pueden llevar tu mochila o bolsa. La comida típica son los fish and chips, hay un localito en Casemates square muy bueno. Antes de salir de Gibraltar echamos gasoil al barco porque es más barato que en España, de allí navegamos rumbo al Mediterráneo!


     







Oporto, Portugal

Recorrimos 167 Km en auto desde Baiona a Oporto, fueron casi dos horas de camino. Dejamos el auto debajo de la catedral, en un barrio popular, con un mercado y estrechas callejuelas con la ropa colgada en los balcones de sus edificios. Visitamos La Catedral y el claustro, precioso por sus patios de azulejos. De allí caminamos por el centro, entramos un momento a la estación de trenes de San Bento, para ver la historia de Portugal en sus azulejos. Después caminamos hasta la plaza Libertad donde está un monumento del Rey Pedro IV a caballo. Caminamos un poco por la Av. Aliados para ver los edificios modernistas. Llegamos a la librería Lello, en la calle Carmelitas, un edificio muy bonito de 1909, el interior es todo de madera y tiene una escalera majestuosa con una alfombra roja que te lleva al segundo piso, donde tienen exposiciones de arte y una cafeteria. En está zona están las mejores boutiques y tiendas de diseño de Oporto. De allí bajamos por la calle Campo dos Mártires de Pátria, donde está la casa oriental, una tiendita muy simpática abierta desde 1910 donde venden abarrotes, quesos, embutidos y fruta. Caminamos por esa misma calle hasta llegar nuevamente a la Catedral, pero antes paramos a comer un bocadillo de bacalao y un vino dulce de oporto. Con el auto fuimos junto a la orilla del río para ver la zona de la Ribeira. Llegamos a Baionas muy tarde a dormir en el barco.

Claustro de la Catedral
Librería Lello

                                   







                                   


De Baiona a la Costa Portuguesa

El Puerto de Baiona en Galicia, es conocido por ser el primer lugar donde desembarcó Colón al regresar de América. Estuvimos unos días amarrados en la marina, aprovechamos para rentar un auto, vistamos Santiago de Compostela y Oporto. Por las tardes caminábamos por el paseo Monte Boi, fuimos al Fuerte, y una tarde entramos al Parador de Gondomar a tomar algo. Algunas noches cenamos unos deliciosos pulpos a la gallega y pimientos asados el viejo San Docan.
Salimos a navegar con la puesta de sol, (el viernes 01 de Julio de 2011), rumbo a la Costa Portuguesa. En la noche nos tocó poco viento, pero en la mañana cambió y pudimos subir la velocidad del barco, navegamos con mucho oleaje por dos días hasta llegar a Peniche, un pequeño pueblo pesquero portugués, allí echamos el 
ancla para poder descansar. Al día siguiente con viento favorable salimos hacia Cascais, un balneario al lado de Estoril. De allí navegamos por el río Tajo, para poder recorrer Lisboa desde el mar. Un paseo precioso, vimos la Torre de Belém, el monumento a los descubridores, y pasamos por debajo del puente 25 de Abril, era impresionante escuchar el sonido de los autos pasando por encima nuestro. Saliendo del río hay que fijarse en las redes que ponen los pescadores para evitar enredarse en ellas. Navegamos 16 horas hasta el Cabo San Vicente (108 millas). Llegamos en el amanecer cuando los primeros rayos del sol lo iluminaban, es un cabo temido por sus fuertes corrientes, pero tuvimos suerte de que hubiera poco viento y lo pasamos sin problemas. Hicimos una pequeña parada muy cerca, en la Ensenada Belixe, para darnos un buen baño de agua fría en el mar que estaba a 16 grados, después seguimos hasta Sagres, una pequeña bahía donde pasamos la noche, en lo alto estaba los restos de la antigua escuela de Enrique el navegante, del siglo XVI.  A la mañana siguiente salimos rumbo a Faro, y fondeamos frente a Culatra, una isla que tienen tres mil habitantes, no hay carreteras ni autos solo se llega con taxi-lancha.
Temprano por la mañana salimos de Portugal hacia aguas internacionales, navegamos un día y medio hasta Gibraltar.

Bahía Baiona
Cabo San Vicente
isla Culatra
Sagres










Santiago de Compostela, Galicia

Cuando llegamos a Baiona, dejamos el barco en la marina y alquilamos un auto para ir a Santiago de Compostela, a 128 Kms, llegamos en una hora y media. 
Desde la Edad Media fue un destino importante, porque aquí se encuentra el sepulcro del Apóstol Santiago, llegaban peregrinos de todas partes del mundo que caminaban por la ruta de Santiago, que llega hasta La Catedral. Hasta el día de hoy la visitan miles de peregrinos cada año. La ciudad es muy agradable, el centro histórico es peatonal y hay muchos bares, restaurantes y ambiente por las calles. No nos fuimos sin antes comer unos pulpos a la gallega y una empanada de atún y nos llevamos una tarta de Santiago, hecha con almendras y azúcar.


 

                   




jueves, 17 de octubre de 2013

Sables d´olone, Francia


Después de tanta espera y preparación del barco, llegó el día de salir a navegar. Un 22 de Junio de 2011 soltamos las amarras a las once de la mañana, del puerto de Sables d´olone, en el Atlántico Francés para comenzar nuestra aventura de vida por los mares.
playa de Sables
Fuimos rumbo a la Costa Española, para entrar por Galicia. Me tomé dos pastillas de dramamine para el mareo, y Olé!, navegamos casi todo el día con viento en contra, a siete y hasta ocho nudos, así que las pastillas no me sirvieron de mucho, el barco se movía como una montaña rusa. Eramos tres en el barco. Fueron cuatro días de navegación y solo vimos un par de pesqueros en el camino, uno de los días nos visitó una familia de delfines, que saltaban en la proa del barco y nos siguieron por un largo rato. Por la mañana muy temprano vi la silueta de Filisterre, a contraluz, al fin tierra! navegamos a favor del viento y por la tarde entramos a las riadas, que son unos entrantes de mar en la Costa Gallega. Después de varios días de paz en el mar echamos el ancla frente a la playa, rodeados de más barcos.

 
Riada de Aldan, Galicia